martes, 7 de octubre de 2008

Los niños y el Internet



¡Otra vez la burra al trigo!

dirá usted con seguridad amable lector, cuando por enésima ocasión lea algunos argumentos de Tuba Libre con respecto a los delitos informáticos que en 2008 han crecido ALARMANTEMENTE en la aldea global.

Sin embargo, creemos firmemente que ser tan reiterativos no nos dañará tanto como padecer alguno de los más de 100 tipos de delitos tipificados como cibernéticos por las múltiples asociaciones y organizamos de protección a usuarios de internet, que en el mundo trabajan día a día para intentar librarnos de las lacras sociales que pululan en la gran red. Tenemos navegando las 24 horas del día, toda una perversa colección de bichos raros, que agazapados en el anonimato están a la espera de incautos para lograr sus criminales fines; hay psicópatas, pederastas, fraudeadores, asaltantes, robacoches, tratantes de blancas, asesinos, secuestradores, enfermos mentales, vengadores, pervertidos, usurpadores, calumniadores, paranoicos, drogadictos, y todos los tipos de sabandijas que usted se pueda imaginar. Navegar en internet sin los conocimientos adecuados de seguridad, puede crearle algo más que un simple dolor de cabeza. La brecha tecnológico-generacional aporta también su granito de arena, los adultos cuarentones en adelante no tuvimos el privilegio de nacer en una época tan tecnologizada como la actual. Nuestros hijos nos llevan años luz de distancia en el manejo de las nuevas tecnologías y el natural temor a lo desconocido produce nauseas en algunos adultos conservadores. Muchos de ellos incluso tachan a las nuevas tecnologías como “Cosa del diablo” ; y aquí es donde está el purrum, si nosotros como cabeza de familia, responsables del cuidado y educación de un puñado de chamacos, desconocemos y aún peor, satanizamos las nuevas tecnologías ¿cómo jijos de la chinaca vamos a poder orientarles sobre los riesgos a los que se exponen al navegar por la red sin un ápice de conocimientos sobre seguridad cibernética?, ¿no cree que vale la pena adentrarse en este “extraño mundo de la internet” por el simple hecho de proteger a nuestros chamacos de tanta tepocata –dijera Fox- que abunda en el ciberespacio? ¡Of course!, Si que lo vale.
Van pues algunos reiterativos concejillos al respecto, para que usted pueda librar una batalla más pareja contra los malos de la ciberpelícula.

1.- Por vida de dios, el Internet no es cosa de Diablo, ¡no la chingue!, el internet es tecnología de punta, tecnología avanzada. Conózcala, vaya a un cibercafé y no le de vergüenza preguntar como hacerle para navegar, el dependiente tiene la obligación de orientarle, ¡para eso le paga!. Si le es posible, tome un curso para principiantes, con una par de sesiones podrá manejarse en la red de manera decorosa.

2.- Platique con sus hijos sobre sus preferencias de navegación, pregúnteles a cuales páginas son asiduos visitantes, escuche con atención las pláticas sobre internet que sus hijos tengan entre si o con otros muchachos. Apunte palabras claves como Facebook, Myspace, Chat, Messenger etc. Después podrá buscar y visitar esas páginas y evaluar su contenido. Documéntese para saber como actúan los malandrines cibernéticos, existen muchos materiales al respecto en la gran red una excelente opción es www.protegeles.org

3.- ¡Caray!, definitivamente la Internet no es una niñera segura, acuérdese de “La mano que mece la cuna”. Dejar a sus hijos horas y horas navegando por internet ES UNA SOLUCIÓN COMODINA, busque alternativas de diversión, foméntele actividades adicionales, que ocupe su tiempo en actividades físicas o intelectuales que ayuden en su formación y establezca horarios de navegación. Es cierto, el Internet se necesita para realizar muchas tareas, ponga horarios de internet para investigaciones escolares y horarios de internet para esparcimiento, y Sobre todo RESPETELOS Y HÁGALOS RESPETAR.

4.- Platique mucho con sus hijos, e infórmeles de los riesgos y maneras en que los delincuentes tratan de hacer migas con sus víctimas. Ilústrelos bien sobre la imperiosa necesidad de NO DAR NINGÚN DATO PERSONAL POR LA RED; domicilios, teléfonos, nombres completos, lugares de trabajo, escuela y en general actividades cotidianas familiares son información super valiosa para las cucarachas cibernéticas. Déjeles perfectamente claro que hacer una cita con un “desconocido conocido por la Interent” es altamente peligroso. Usted normalmente se asegura de saber con quien andan sus hijos y además trata de conocer a sus amigos ¿no?, pues bien, en la Internet es aún más peligrosa la relación de amistad con extraños, ya que usted NO PODRÁ FÁCILMENTE CONOCERLOS.

5.- Esté muy atento de síntomas extraños como llamadas telefónicas de “amigos” desconocidos hasta ahora por usted; la llegada de paquetes a nombre de sus hijos o la obsesión por estar conectados más allá de los horarios preestablecidos.

6.- Por último algunos puntos extras: Deje la computadora de sus hijos con el monitor a la vista de todos; no permita el uso de cámaras web sin su estricta vigilancia; evite que sus hijos naveguen en sitios como cibercafés o en bibliotecas, centros recreativos o escuelas que le inspiren poca confianza; haga que su proveedor de internet instale el modem en su habitación, por las noches apague el modem y sobre todo; no quite el derecho de sus hijos a utilizar esta esplendida herramienta moderna, no la satanice, conózcala, disfrútela y obtendrá la herramienta de trabajo y esparcimiento más importante de esta era tecnológica.

Este artículo se publicó el domingo 07 de octubre 2008, en los peridódicos Ecos de la Costa y Correo de Manzanillo, de Colima, México.